jueves, 9 de julio de 2009

Análisis de la competitividad como elemento de sostenibilidad y eficiencia en las cooperativas agrícolas







La competitividad es la capacidad de una organización pública o privada, lucrativa o no, de mantener sistemáticamente ventajas comparativas que le permitan alcanzar, sostener y mejorar una determinada posición en el entorno socioeconómico. La Competitividad es concebida como la capacidad de identificar y aprovechar, en un escenario específico, ventajas económicas en un mercado global en forma permanente y sostenible, para ello requiere de actores y condiciones competitivas y de políticas y acciones apropiadas, está tiene incidencia en la forma de plantear y desarrollar cualquier iniciativa de negocios, lo que está provocando obviamente una evolución en el modelo de empresa y empresario.

En la actualidad vivimos en un mundo altamente competitivo debido a la globalización y a los cambios a los cuales estamos expuestos cada día, como lo son lo económico, político, social y tecnológico, es por ello que todas las organizaciones están enfrentando numerosos retos, entre ellos el ser más competitivos, para lo cual deben mejorar sus procesos, desarrollar e implementar nuevas tecnologías, mejorar o cambiar las estrategias de mercado y consigo el posicionamiento de nuestros productos, de igual forma se deben contar con buenos sistemas de financiamiento y poseer un capital humano altamente calificado, todo ello con la finalidad de ser cada vez más competitivos. Es importante resaltar que en nuestro país actualmente no solo compiten las empresas como Compañías Anónimas, Sociedades de Responsabilidad Limitada, Sociedades en Nombre Colectivo Y Sociedades en Comandita sino que también entran a competir las cooperativas, siendo está última la que tiene un mayor compromiso para ser competitiva, estas deberán adaptarse a las aperturas económica, innovaciones tecnológicas y a la concentración empresarial, las cooperativas deben adecuarse a las condiciones exigidas por el mercado para poder mantenerse en este mercado tan competitivo.

Las cooperativas son asociaciones autónomas de personas que se han unido voluntariamente para formar una organización democrática cuya administración y gestión debe llevarse a cabo de la forma que acuerden los socios, generalmente en el contexto de la economía de mercado o la economía mixta. Su intención es hacer frente a sus necesidades y aspiraciones económicas, sociales y culturales comunes haciendo uso de una empresa de trabajo asociado.

La diversidad de necesidades y aspiraciones de los socios, que conforman el objeto social o actividad cooperativizada, define una tipología muy variada de cooperativas, una de ellas es la del sector agrícola, las cuales abren oportunidades de mercado a los productores más pequeños en la medida que
eleven su nivel técnico empresarial, se capaciten en asuntos relacionados con la administración de empresas, apliquen el modelo cooperativo, e incorporen elementos que son propios de su naturaleza y, asimismo, promuevan el desarrollo de la competitividad mediante una gestión con visión estratégica. Dentro del contexto de la economía social, las cooperativas son empresas que han surgido como una alternativa para solventar algunos problemas de carácter social como la pobreza, desigualdad, desempleo, entre otros aspectos.

En el plano agrícola, las cooperativas nacen como una iniciativa de los productores para dar respuestas a necesidades que la lógica del mercado no resuelve. Dentro de sus actividades se encuentran: la compra, venta, distribución, transformación de bienes, productos y servicios relacionados con la agricultura, su objetivo es la obtención de un mayor rendimiento de esta actividad y mejorar el nivel de vida rural integralmente. Como organización, representan un mecanismo institucional para insertar a los pequeños productores en la economía nacional, pues facilitan el intercambio de bienes y servicios entre los sectores tradicionales y otros subsectores de la economía permitiendo que estos se beneficien con la transferencia de tecnología.

En América Latina existe una gran experiencia en cooperativas agrícolas, que se han mantenido a través del tiempo a pesar de las adversidades, entre ellas se mencionan las establecidas en Brasil que participan con un 83% en la comercialización del trigo y 68% en la producción de la leche; Colombia comercializa un 35% de la leche fresca y 6% de las exportaciones totales de café; en Chile la Confederación de Cooperativas Campesinas (CAMPOCOOP)
Unificó al movimiento cooperativo.

En el caso venezolano las cooperativas agrícolas aparecen a finales de la década de los sesenta impulsadas por agentes externos al sistema económico como las iglesia, organismos gubernamentales y agencias internacionales las cuales buscaban mejorar las condiciones de vida de los agricultores, hasta la década de los setenta, la evolución de las cooperativas agrícolas fue lenta, funcionaban 20 cooperativas agrícolas que agrupaban a 7.346 miembros, tendencia que se ha ido incrementando en las últimas décadas. La década de los sesenta representó una etapa importante para el desarrollo del cooperativismo en Venezuela, considerada por algunos como la época de institucionalización del cooperativismo, cuando se formularon los marcos jurídicos, políticos e institucionales de dicho movimiento. En los noventa, con la liberalización del mercado se pretendía poner a competir a los productores locales con los foráneos, sobre la base de las ventajas comparativas y el desarrollo de las competitivas. En este contexto, se generaron una serie de cambios entre los que se encuentran la reorientación del aparato productivo, el
mejoramiento de los niveles de eficiencia, la implementación de estrategias de reconversión, entre otros. Igualmente surgieron experiencias asociativas para responder a las necesidades colectivas de los pequeños productores.


En las regiones andinas, se puede observar la generación de organizaciones que están desarrollando respuestas innovadoras ante los problemas económicos, sociales, culturales. Esto lo podemos constatar particularmente en el Municipio Pueblo Llano del Estado Mérida, las cooperativas se orientaron hacia los servicios de apoyo a los productores agrícolas en todas las fases del proceso productivo, de allí que las organizaciones campesinas representan una condición básica para lograr una articulación en una agricultura globalizada. En este orden de ideas, de acuerdo a la Superintendencia Nacional de Asociaciones Cooperativas (SUNACOOP), las cooperativas han aumentado desde el año 1998 hasta noviembre de 2004 de 820 a 21.784, agrupando casi un millón de asociados. Las actividades más representativas son las relacionadas con bienes y servicios que representan el 51%, seguida de la producción agropecuaria con un 31%, transporte con 10%, servicios sociales 4%; consumo 2%, ahorro y crédito 1%, respectivamente. Para que las cooperativas pudieran funcionar, se crearon organismos crediticios con el objeto de impulsar el desarrollo y mejorar la calidad de las cooperativas. Entre ellos, se mencionan: el Banco del Pueblo Soberano, Banco de la Mujer, Fondo de Crédito Industrial (FONCREI), Fondo de Desarrollo Micro financiero (FONDEMI), Fondo Nacional de Desarrollo Agropecuario Pesquero Forestal y Afines (FONDAFA), Banco Industrial de Venezuela, Banco de Fomento Regional de los Andes y Banco de Desarrollo Económico y Social (BANDES).

¿Cómo determinar costos en la industria de la construcción?







Las empresas de la construcción están buscando las condiciones adecuadas que hagan factible, de manera eficaz, la toma de decisiones, llevar a cabo sus operaciones en el mercado y desarrollarse dentro y fuera de la compañía. Para lograr estos objetivos, uno de los recursos fundamentales es la información, y los gerentes enfrentan su ausencia generando costos innecesarios y evitables, los gerentes, por falta de información, toman decisiones erradas que reducen la eficiencia y la eficacia de la compañía aunque sus efectos no se reflejen, de manera directa, en las cuentas contables.

La competitividad entre las organizaciones hace que las empresas enfrenten grandes retos, por lo cual para sobrevivir y expandirse, se debe mantener una estructura competitiva, lo que las obliga a tener un sistema de información de costos que permita, entre otros aspectos, conocer el resultado contable obtenido por la empresa, controlar la eficacia de la organización y de cada uno de sus componentes, y tomar decisiones que faciliten la adaptación permanente de la empresa.

Los costos en el sector de la construcción están asociados a los recursos que se requieren para colocar físicamente los elementos de construcción en el proyecto. Estos costos incluyen lo referido a materiales; mano de obra; maquinarias, equipos, instalaciones y herramientas; subcontratos y cualquier otro costo que no se identifica, de manera directa, con una determinada obra o contrato. En la producción de la industria de la construcción , los materiales están representados básicamente por la piedra, el cemento, agua, arena, polvillo, bloques, tabelones, hierro, madera, entre otros; que en la acumulación del costo de producción deberían considerarse como costos directos. Los costos de mano de obra, salario y cualquier otro gasto asociado a este concepto, están en función, por un lado, de la cantidad de especialistas que se requieren para la ejecución de los distintos trabajos ocasionados por un contrato y, por el otro, de la continua rotación, en su mayoría, del personal obrero; situación que ocurre por la misma naturaleza temporal de las obras, la paralización de los trabajos y la impredecible ubicación geográfica de todos los proyectos que ejecutará una misma empresa constructora. Las maquinarias, equipos, instalaciones y herramientas dan soporte al proceso productivo sus costos se dividen en dos grupos: a) cuando el activo es propiedad de la empresa, los costos están conformados por depreciación, pérdida de valor por el uso, el desuso y desgaste en las operaciones de producción, y los gastos de operación que se incurren de manera ordinaria como el seguros, reparaciones y mantenimiento, combustibles y lubricantes, repuestos y partes menores, entre otros; b) cuando el activo es arrendado, el único costo que debería imputarse a la obra, sería el correspondiente al pago del alquiler. En cuanto a los subcontratos, como acuerdos firmados que hace el contratista con terceros
especializados en un área determinada para que realicen parte de la obra o instalaciones contempladas en el proyecto, generan costos de fácil imputación a las distintas obras, porque son establecidos por el subcontratista.


Es de hacer notar que una vez analizados los diferentes elementos del costo, es necesario señalar que para la acumulación y determinación de los costos de producción, hay que seleccionar, entre los diferentes sistemas como lo son por órdenes de trabajo, por procesos y mixto, aquel o aquellos que se adapten a la naturaleza de las actividades que desarrolla la empresa. El sistema de costos por órdenes de trabajo, se emplea cuando la empresa fabrica a partir de las especificaciones suministradas por el cliente en cuanto a diseño, tiempo, material, calidad, y requerimientos en general. Los costos se acumulan para cada orden de trabajo compuesta por productos individuales o pequeños lotes de productos. El sistema de costos por procesos, se utiliza cuando la empresa elabora productos homogéneos de manera continua. La acumulación del costo se hace por departamentos o centros de costos para un período determinado. En relación con el sistema de costos mixto también llamado, de operaciones, se utiliza en las empresas que manufacturan productos diferentes con requerimientos de materiales distintos, pero con operaciones similares de procesamiento.

Viabilidad de la solidaridad organizacional como herramienta de supervivencia en la realidad actual





El Darvinismo Económico, Es una teoría que expone que las economías nacionales, empresas y las personas, sólo podrán sobrevivir si son las más aptas. Lo cual, ha conllevado que muchos empresarios quieran sobrevivir a cualquier costo, aun cuando esto signifique que personas naturales y jurídicas sucumban en derredor, o que el costo ecológico sea demasiado alto. Una interpretación casi unánime de esta teoría toma en cuenta que sólo los esfuerzos individuales y egoístas pueden hacer sobrevivir al individuo, y aún con fuerza cuando también se apoyan en las teorías smithianas del beneficio. Es decir, lo que se busca es motivar los esfuerzos individuales más que los emprendimientos colectivos, por el componente altruista o de beneficio compartido que los segundos significan.

La teoría clásica de la evolución, aunada a la teoría del gen egoísta de Richard
Dawkins, explican en gran medida la preponderancia de los esfuerzos individuales como herramienta para la supervivencia, también se ha puesto en evidencia la necesidad de explicar las posibles acciones altruistas que se presentan en organismos como las abejas, lobos, peces y hormigas. Esto nos permite pensar que dependiendo de las circunstancias, en ocasiones es conveniente funcionar como entidades colectivas, así la razón última de la participación grupal, esté constituida por razones egoístas y sólo por fines de beneficio individual.

Las organizaciones deben orientarse en cierta medida hacia comportamientos solidarios, se dice que existen tres tipos de solidaridad y son: la impuesta, una natural y una mixta, conformada esta última por las dos anteriores. La natural, que generalmente es producto de motivaciones religiosas, humanismo laico o incluso egoísmos, se caracteriza primordialmente por ser voluntaria. La impuesta, es aquella en la cual no se da al individuo ninguna discrecionalidad en el actuar. Generalmente producida por la coerción de la ley, un individuo determinado debe proporcionar ayuda a otro. Este caso abarca todo tipo de tributo o imposición pecuniaria en especie. Una división con un paradigma positivista de por medio, pues supone una visión única de la ley como punto de quiebre y el fraccionamiento de la misma basado en que las únicas leyes válidas son las estipuladas por el gobierno como representante administrativo del Estado y sin la presencia de leyes religiosas o de fuente natural.


Por otra parte hay algunos autores que clasifican a la solidaridad de acuerdo al tipo de grupo en el cual se desarrollen las actividades, es decir, podemos observar una solidaridad en grupos informales y dentro de grupos formales, que también puede llamarse organizacional. En segundo lugar, se reconoce la solidaridad impuesta como aquella que se establece a través de una disposición normativa, pero con la diferencia que se incluyen las leyes naturales y religiosas, como fuentes de dicha solidaridad y la natural, como producto del humanismo laico e incluso de los egoísmos, pero con la única condición de ser fundamentalmente voluntaria. Se considera mixta, sólo en el caso que se genere el acto solidario voluntario, independientemente de que sea impuesto en ley y cuando se ejecuta por disposición legal, pero se transforma en voluntario por conciencia de la causa.


La solidaridad en las organizaciones y sus miembros debe pasar por procesos en los cuales no sólo se tomen en cuenta basamentos epistemológicos, sino que también es necesario tomar en cuenta las metodologías de aprendizaje de los individuos que participan en las interrelaciones, pues existen implicaciones de aprendizaje que incorporan nuevos paradigmas. El hecho de que cada individuo que emprenda un ambiente de solidaridad organizacional, requiera hacer una revisión crítica de sus paradigmas o mapas mentales, que traiga consigo cambios de ciertas creencias, marcos de referencia y de comportamientos; conlleva una resistencia hacia el proceso en sí mismo y por tanto a su posible aprendizaje. Es por ello que deben concebirse procesos de desaprender, es decir de dejar de hacer, pensar o ser como éramos antes del proceso de aprendizaje. La solidaridad implica entonces pasar de estados de impotencia a estados de poder. Pasando por escenarios de poder, por medio de la coerción, o por medio de la negociación, propios de la solidaridad impuesta; hasta conseguir el poder de ser, pensar y hacer, por medio de principios primordiales

Es importante resaltar que el desenvolvimiento del personal dentro de las organizaciones y sus miembros como los socios, directivos, representante y gerentes harán que los procesos vayan encaminados bajo el esquema de un plan definido y con un alto grado de armonía y dignidad, todo el factor humano tiene una visión clara de su funcionamiento y las posibilidades de una cohesión grupal son muy grandes. Pero, en los casos de rupturas intraorganizacionales, en las cuales grupos de socios, grupos de gerentes representantes sindicales y otros personeros directivos van por caminos distintos, el factor laboral de la organización puede sufrir una división u orientación hacia un bando o hacia el otro, muchas veces sin criterios definidos, lo que conduce a un apoyo irrestricto a cualquier idea o situación que surja.


A pesar de que la realidad económica actual va hacia la actividad individual como herramienta de supervivencia organizacional, la solidaridad se puede presentar como instrumento fundamental para la evolución de los diferentes entes productivos y el logro de sus fines de manera más eficiente. El apoyo entre diferentes entes se establece como parte indispensable del desarrollo organizacional actual, la idea no es llegar a la homogenización de las empresas
en sistemas de altruismo o egoísmo puros, sino al contrario, lograr dinámicas de equilibrio entre diferentes entes, que permitan una mayor posibilidad de supervivencia organizacional, para ello se hacen necesarios instrumentos que permitan aprender a desaprender y ambientes transformadores que permitan un verdadero cambio paradigmático, eliminando las conceptualizaciones tradicionales sobre los asuntos organizacionales y comenzar a generar escenarios de equilibrios solidarios y una nueva concepción de la dinámica en la vida productiva actual.

viernes, 3 de julio de 2009

Evaluación de la iluminación en los puestos de trabajo de una Empresa petrolera








Las Condiciones de trabajo son un área interdisciplinaria relacionada con la Seguridad, salud y calidad de vida en los lugares de trabajo. Las condiciones en los lugares de trabajo se ven influenciadas directamente por la actividad productiva, ya sea de forma positiva o negativa. Cuando estas condiciones son extremadamente desfavorables, se corre el riesgo que los trabajadores y las trabajadoras puedan enfermarse o accidentarse como consecuencia del trabajo realizado.
Actualmente, y con base en las normas establecidas para la iluminación, se realizan estudios en los lugares de trabajo para conocer y mejorar sus condiciones. Estos tienen como fin determinar la cantidad y calidad de luz adecuada, de tal manera que permita realizar labores con eficiencia y comodidad, además de optimizar la percepción de la información visual utilizada en el desarrollo del trabajo y conservar el nivel adecuado de rendimiento y calidad del producto. De esta forma se busca garantizar una máxima seguridad en torno a los oficios y proporcionar un adecuado bienestar visual.

En la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela se establece la responsabilidad del ente empleador para garantizar condiciones y ambientes de trabajo seguros, que conserven la salud, la integridad física y mental. Por tal razón, para garantizar la seguridad visual de los trabajadores y trabajadoras, estos deben ser informados previamente al inicio de sus actividades de las condiciones ambientales de sus sitios de trabajo, de los daños que estas puedan causar a la salud, así como de los medios o acciones para prevenirlos.

Por otra parte dentro de la legislación venezolana tenemos a la Ley Orgánica de Prevención, Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo (LOPCYMAT) dentro de la cual se le exige al empleador y empleadora informar acerca de las condiciones físicas a las cuales se expone al trabajador y la trabajadora en su puesto de trabajo, es por ello que es de vital importancia cumplir con condiciones de trabajo humanas que no le afecten la salud de los trabajadores por una parte así como también la productividad de las empresas.






PDVSA, la mayor corporación industrial de Venezuela, tiene un déficit de personal capaz de dar respuesta inmediata a lo demandado por la LOPCYMAT en cuanto a la determinación y evaluación de los efectos del riesgo ocupacional; la iluminación es uno de ellos. En respuesta, PDVSA ha propuesto la evaluación de los niveles de iluminación en los puestos de trabajo de la casa matriz. El Alumbrado de oficinas y el diseño de alumbrado es esquemático, debido a que el número de tareas visuales es limitado y está bien definido, la altura del plano de trabajo es constante, a 75 cm. del suelo aproximadamente y la altura de los techos es casi siempre constante, a 2,6 m del piso aproximadamente. Partiendo de las evaluaciones realizadas, se determinó que la iluminación en los puestos de trabajo de PDVSA S.A., ubicados en la torre este del edificio La Campiña, no cumplen con lo establecido en la Norma COVENIN 2249-93, lo cual trae como consecuencia que las personas que laboran en estos puestos, se encuentran en situación de riesgo por iluminación. La presencia de luminarias defectuosas y en mal funcionamiento, luminarias con difusores sucios u opacos, o ambos inclusive, lo cual contribuye a la reducción de los niveles de iluminancia en los puestos de trabajo de algunas oficinas, lo cual trae consigo el no cumplimiento de lo establecido en la LOPCYMAT y la constitución de nuestro país.

Caracterización de las pequeñas empresas de confección de ropa y su incidencia en las relaciones laborales




Actualmente en el mundo se esta viviendo un proceso de cambio en gran escala, los analistas y estudiosos del tema, coinciden en que la sociedad industrial, basada en la producción en masa, la energía barata y las economías de escalas, ha llegado a su fin y un nuevo paradigma industrial y social está emergiendo, impulsando a las pequeñas empresas en todos los ámbitos del quehacer humano y particularmente, en la producción y la economía. Este nuevo paradigma industrial cambia no sólo las prácticas empresariales, sino también el actual paradigma de desarrollo a partir del rol que juega la pequeña empresa en los procesos de desarrollo de los países emergentes.


Durante los últimos años el Estado venezolano viene diseñando e implementando políticas dirigidas a fortalecer las pequeñas empresas, con el propósito de abrir la economía y el mercado nacional a la competencia y a la inversión de nuevos actores. Asimismo, se quiere alcanzar una mejor distribución del ingreso que propicie el logro del equilibrio económico y la reactivación del aparato productivo, para alcanzar estos propósitos entre las líneas de acción se encuentra la protección y fomento de la economía social, como una estrategia para la democratización del mercado y el capital y así buscar la participación en el mercado de nuevos actores económicos, tales como empresas familiares, asociaciones comunitarias, cooperativas, pequeños empresarios y las empresas de producción Social.

En Venezuela las pequeñas empresas vienen conformándose como microempresas familiares informales, las cuales funcionan en un solo local que generalmente es la casa del dueño, orientan su producción hacia pequeños mercados, no cuentan con financiamiento y los trabajadores, por lo general, son familiares. Otra forma de organización son las microempresas familiares con acceso a crédito formal, que operan con pocos trabajadores, en su mayoría parientes del dueño, tienen acceso a créditos formales por intermedio de la banca o del Estado, tanto para inicio de las operaciones como en etapas posteriores, lo cual permite el desarrollo de la empresa. Las microempresas conducidas por un profesional, operan con una inversión relativamente alta, utilizan maquinaria moderna y emplean mano de obra compuesta por personas que no hacen parte de su entorno familiar. Por otra parte, se encuentran las cooperativas, que poseen características muy particulares, por ser, asociaciones autónomas de personas que se unen voluntariamente para satisfacer sus comunes necesidades y aspiraciones económicas, sociales y culturales, por medio de una empresa de propiedad conjunta democráticamente administrada.

De acuerdo a lo expresado anteriormente y tomando en cuenta que las pequeñas empresas de confección pueden crearse por grupos familiares o por un profesional experto, pero sin perder de vista su inserción en una economía capitalista, se puede caracterizar la organización del trabajo como simple, sin una estructura jerárquica o flexible formalmente definida, que concentra sus acciones y a los trabajadores en un mismo espacio, realiza tareas rutinarias e individuales sobre partes del producto que luego es ensamblado, bajo las especificaciones y el control del dueño.

La estructura y dinámica de las pequeñas unidades productivas que son emprendidas con muy poco capital y operan al margen de la legalidad, han sido poco estudiadas en la realidad venezolana. Por tal razón, las mencionadas Microempresas de confección fueron tomadas como unidades de análisis, ya que tienen en común la condición de ser microempresas familiares, que se caracterizan por generar una actividad con fuerza de trabajo excluida del mercado formal de trabajo; el número de ocupados por unidad es muy pequeño, en promedio de 5 trabajadores, y cuando existe una demanda que rebasa su capacidad productiva, contratan máximo tres trabajadores hasta cumplir con la producción.

Las pequeñas empresas de confección de ropa, desde el punto de vista gerencial están inmersas en un híbrido conformado por principios del taylorismo y de flexibilización, lo cual no les garantiza participar en el mercado y competir de acuerdo con los parámetros exigidos en la actualidad. Además, existe una ausencia de planes formales de producción, y de estrategias que les permita detectar las oportunidades del mercado y las debilidades y fortalezas de su competencia. El escaso conocimiento del mercado, su forma precaria de organización y de producir, así como el aislamiento dentro del sector, hace que no puedan adaptarse, compartir responsabilidades, con el fin de aumentar la calidad de sus productos y lograr una producción competitiva.

La flexibilidad laboral es una estrategia vinculada a la incertidumbre y en general se orienta hacia la reducción de costos y al incremento de la productividad Los efectos que produce la flexibilización en los trabajadores, permite señalar que al igual que en las grandes empresas se acentúa la explotación y se genera el desempleo estructural, debido a las contrataciones atípicas que crean las condiciones para la precarización y segmentación de la clase trabajadora.

La servucción y la calidad en la fabricación del servicio




La Servucción, es el proceso de elaboración de un servicio, es decir, toda la organización de los elementos físicos y humanos en la relación cliente-empresa, necesaria para la realización de la prestación de un servicio y cuyas características han sido determinadas desde la idea concebida, hasta la obtención del resultado.

La servucción en la empresa de servicios es la organización sistemática y coherente de todos los elementos físicos y humanos de la relación cliente y empresa, necesaria para la prestación de un servicio bajo indicadores de calidad del servicio.


La exaltación de la calidad de los servicios, es lo que hace de la servucción la característica diferencial cada vez más importante para la supervivencia de las empresas de servicios, cualquiera que sea su naturaleza y su ámbito de administración.

En el mundo empresarial y específicamente al tratar temas de gerencia, existe un convencimiento acerca de las bondades que genera el hecho de poner énfasis en la calidad como resultante de la complejidad de un sistema de fabricación de servicios. La calidad es definida como la creación de valor, entendida como el grado de satisfacción de las expectativas de todos los grupos clave, de interés en la organización.

En cuanto a la calidad de servicio se puede decir que viene dada por la proximidad entre el servicio esperado y el servicio percibido, es decir la calidad del servicio mide el grado en que los requisitos deseados por los clientes son percibidos por él tras forjarse una impresión del servicio recibido. Se considera a la calidad del servicio como una medida de satisfacción del cliente, es decir, la percepción del cliente sobre el grado en que se han cumplido sus requisitos.

Actualmente podemos observar el evidente crecimiento de las empresas de servicios, lo que obliga a buscar métodos de trabajo basado en la generación de indicadores de la calidad de servicio, que permita establecer un tipo de indicadores predecibles y controlables. Una vez que las organizaciones de servicios enfrentan las exigencias crecientes de sus clientes, los competidores mejoran su oferta de servicio, como respuesta a la creciente calificación de los usuarios y crecientes atributos en su conducta como cofabricantes del servicio que demandan. Por otra parte vemos como la oferta de tecnología brinda nuevas herramientas, lo cual hace que se multiplique el esfuerzo para mantener y mejorar la posición de mercado, e impone a las empresas prestadoras de servicios, el aseguramiento de un estándar operacional superior, y emprender un proceso constante de innovación, es por ello que se cree que en el futuro aumente el número de organizaciones que introduzcan prácticas de innovación de servicios, asociados con el modelo de negocios o a la definición de sus mercados y canales de servicios.

lunes, 22 de junio de 2009

El Movimiento Sindical ante las Nuevas Formas de Organizar el trabajo





Las empresas buscan el cumplimiento de los objetivos para obtener buenos resultados, pero estos serían muy difíciles de alcanzar de no ser por el talento humano el cual es un factor realmente muy importante para las organizaciones. Las organizaciones de los trabajadores buscan defender los derechos de los trabajadores, la defensa de sus intereses y mejores condiciones de trabajo, frente a los patronos, las organizaciones empresariales y el gobierno, hemos observado como día a día estos movimientos sindicales han venido creciendo aceleradamente en el mundo, tal vez por lo expuesto anteriormente las grandes corporaciones transnacionales toman la decisión de realizar sus inversiones en lugares donde existe muy poco desarrollo de los sindicatos, para obtener ventajas sobre estos y consigo mayores beneficios. Actualmente vemos como las organizaciones de los trabajadores se han ido adaptando a los cambios que se viven en los diferentes aspectos tales como, el económico, político y social, todo ello con la finalidad de seguir luchando por el beneficio y las mejores condiciones de trabajo para todos sus miembros.